Diseñado por Browning con un original cerrojo muy rápido e intuitivo, el rifle Maral SF monta también un cañón de alta calidad que, junto con su mecanismo de repetición, lo convierten en una opción muy interesante para practicar la montería, el rececho o ambas modalidades con un mismo rifle.
Este artículo describe las características de su peculiar acción.
En 2014, poco después de haber sido presentado en España, tuve la oportunidad de disparar por primera vez un Maral, rifle que había sido presentado por Browning International en IWA 2013 terminado exclusivamente en madera de nogal, muy bonita por cierto (grado 3), con características básicas que se correspondían casi con las de la versión actual SF Fluted HC, pues tenía su mismo acabado, cañón acanalado, etc.
Recuerdo que lo probé sin visor en calibre 9,3×62 y que pensé que estaba muy bien hecho e ideado: poseía tensor manual del mecanismo de disparo (Hand Cocking, cuyas iniciales HC son las que se incluyen en el nombre del arma), punto de mira de fibra de color rojo y banda de batida que se podía sustituir por un alza para rececho con puntos de contraste de color verde que se entregaba como accesorio.
Además, su culata bávara con carrillera se podía equipar con cantoneras anti-retroceso de diferentes espesores (12, 20 y 25 mm) y desmontar fácilmente del resto del arma para poder transportarlo más cómodamente (con una llave que se suministraba con el rifle).
Incluso se podía personalizar adquiriendo otros tipos de culatas (con montecarlo o rectas), delanteras (con o sin tulipa) de madera de nogal más lujosa aún (grados 4 o 5) y con diversos tipos de placas (‘pletinas’ de madera o grabadas) para embellecer los laterales del cajón de mecanismos.
Pero lo que más me llamó poderosamente la atención fue el novedoso y rapidísimo sistema de repetición por cerrojo que utilizaba, que Browning recomendaba tanto para montería como para rececho, argumentando que el Maral era también un rifle muy preciso y seguro en esta modalidad debido al tipo de cierre, cañón y tensor HC que equipaba, argumentos con los que estaba de acuerdo en teoría pero que no compartía del todo ya que, debido a su acabado, consideraba que la mejor aplicación del arma era la montería o los recechos poco complicados con el fin de no maltratar su bonita madera de nogal.
Así que pensé que no tardarían en lazarlo en versión sintética.
Craso error, porque pasaron los años y todas las versiones, incluso las que se presentaban como novedad, seguían siendo de madera hasta que por fin, a finales de 2017, Browning presentó en Escocia, a la prensa especializada internacional no uno sino dos rifles Maral sintéticos:
– El rifle Maral SF Composite Brown HC
– El rifle Maral SF Composite Nordic HC,
Si bien solo pudimos disparar y probar el Composite Brown HC en condiciones muy duras y a grandes distancias para cazar ciervas y corzas, equipados con los modelos de visores más potentes que fabrica Kite Optics.
UN RIFLE FIABLE, RÁPIDO E INTUITIVO
Concretamente, el rifle Composite Brown lo probamos en calibre .308 Win. y días antes de escribir estas notas he vuelto a probar en el campo de tiro un SF Fluted HC (de madera), está vez en calibre .30-06 y con un visor de batida Kite 1-6x24i, que me ha servido para recordar sus mecanismos (idénticos a los de los los modelos sintéticos) y utilidad en montería y rececho.
El Maral, aunque es un rifle de cerrojo, utiliza el mismo tipo de cierre rotativo con siete tetones que equipa el semiautomático BAR (que además de seguro y muy fiable permite fabricar rifles muy precisos) y, como se ha apuntado, es rapidísimo.
En mi opinión, el tipo de cerrojo más rápido del mercado porque es de acción lineal pero, una vez que se desplaza hacia atrás, no es necesario empujarlo hacia delante para introducir un cartucho en la recámara: solo hay que soltarlo y él solo se desplaza, extrae un cartucho del cargador y lo introduce en la recámara donde se bloquea en la prolongación del cañón, al girar la cabeza.
Esto se debe a que posee un mecanismo (denominado Quick Reloading System) que lo impulsa hacia delante de forma suave pero enérgica.
Por otro lado, la palanca del cerrojo, que termina en forma de bola gruesa, no sobresale del cajón de mecanismos cuando se lleva hacia atrás; y para lograr que la palanca retroceda hasta el tope no es necesario ejercer mucha fuerza.
Y, como hacia delante también se desplaza (ya sola, al soltarla) de forma suave, el cazador puede tirar del cerrojo tan rápido como lo desee sin que su movimiento desequilibre el rifle y sin miedo a golpearse la cara con la parte trasera del cierre o con el puño: por tanto, con un Maral es posible seguir el blanco y recargar y disparar muy rápido sin desencarar.
Eso sí, como normalmente estamos acostumbrados a llevar el cerrojo hacia delante, las primeras veces que intentamos recargar el rifle tendemos a hacerlo así, por lo que antes de salir de caza es preciso familiarizarse con el funcionamiento de esta peculiar acción en casa (en ‘seco’) o mejor con fuego real en un campo de tiro.
Cabe añadir que otro de los puntos fuertes del rifle, independientemente de la versión que se trate, es que va equipado con un cañón acanalado de alta calidad y muy preciso fabricado por FN en Herstal (Bélgica), que en algunas versiones de madera y sintéticas se ofrece con rosca en la boca de fuego para poder montarle un freno de boca o un supresor sónico, cada vez más de moda y de uso legal en muchos países de todo el mundo.
Ambos accesorios representan una opción muy interesante si queremos utilizar nuestro propio rifle con supresor fuera de España o bien deseamos utilizarlo con freno de boca para que tenga menos retroceso y más precisión, pues los frenos de boca mejoran también las agrupaciones y, por tanto, la eficacia del arma en caza a largas distancias.
Una de las dos nuevas versiones sintéticas, terminada en color marrón, viene de serie equipada con freno de boca.
A todo lo dicho es necesario añadir que se trata de un rifle muy ergonómico y bien equilibrado a tal punto que en las manos parece más ligero de lo que indica el fabricante.
Esto sucede con otras muchas armas pero con el Maral se nota especialmente tanto con las versiones de madera como sintéticas que he probado, algunas con visor y con monturas desmontables Browning Nomad de acero.
ÚTIL EN CUALQUIER MODALIDAD
El Maral es un rifle que cada vez que lo he probado me ha impresionado tanto por su nuevo mecanismo como por su suavidad de funcionamiento, precisión y, en el caso de las versiones de madera, elegante diseño.
En montería no cansa en las manos y se puede encarar y apuntar de forma intuitiva, además de recargar tan rápido que no creo que ningún rifle de cerrojo, aunque sea de acción lineal, pueda superarlo en este aspecto.
Y en rececho tiene todo lo que necesita para destacar: un buen disparador (neto y directo), alta precisión gracias a su sistema de cierre y calidad de los cañones.
Además, tanto los modelos sintéticos como los de madera se ofrecen con tensor manual del mecanismo de disparo, cuyo mando es silencioso, lo que hace que sea posible, con el mecanismo destensado, portar el rifle con total seguridad en montería y sobre todo en rececho porque, aunque nos caigamos nosotros o el arma, no se disparará.
Por otro lado, las versiones sintéticas se ofrecen con culatas con lomo regulable en altura lo que las convierte también en aptas para cazar en movimiento porque permiten montar cualquier tipo de visor en el arma con la certeza de que siempre podremos tirar con la cara apoyada en la culata.
¿Y en una espera? Pues también es muy útil porque, precisamente gracias a su tensor manual silencioso, podemos entrar al puesto con un cartucho en la recámara, movernos con el arma en la oscuridad con seguridad y armar o desarmar el rifle las veces que lo necesitemos sin hacer ruido.
Buenas,,, en que calibres se fabrica el rifle browning maral composite
Muchas gracias por tu tiempo