Las elecciones autonómicas en Andalucía se celebrarán de manera anticipada el próximo 19 de junio después de que el actual presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, adelantase los comicios con la intención de tener un presupuesto aprobado a principios de 2023. El Ejecutivo autonómico se enfrenta a esa fecha «con preocupación» porque han comprobado una «desafección del campo» o «distanciamiento» del mundo rural, que muestra más afinidad con el discurso de partidos como PP y VOX. Por ello, desde Moncloa y Ferraz se están trabajando para esta cita electoral porque, admiten desde el Gobierno, «es importante para Andalucía, pero también para España».
Para rebajar el enfado del campo, el PSOE se ha reunido con la Federación Española de Caza (RFEC) y con la Oficina Nacional de la Caza (ONC) para tratar, entre otras cuestiones, el Anteproyecto de Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales. A finales de marzo hubo una primera reunión entre miembros del PSOE y del sector de la caza. En esta y otras reuniones no parecen haberse acordado soluciones «tangibles» a los problemas presentados por los cazadores, pero José María Mancheño, presidente de la Federación Andaluza de Caza (FAC), califica el encuentro entre socialistas y cazadores de «cordial». «El PSOE nos transmite tranquilidad y que confiemos en ellos, que muchas de nuestras propuestas serán aceptadas y dejaremos las preocupaciones a un lado», añade el también vicepresidente de la RFEC, incidiendo en que quieren «avances» por parte del Gobierno.
Previamente a esa reunión, el 11 de abril, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) trasladó el «apoyo del Gobierno» al sector de la caza en un encuentro que no fue valorado por la RFEC ni la ONC, entidades del sector que estuvieron presentes. Luis Planas abordó con ellos aspectos como la situación de la tórtola y señaló la Estrategia Nacional de Gestión Cinegética, aprobada en la Conferencia Sectorial del pasado 7 de marzo con el respaldo unánime de todas las comunidades autónomas, como «un hito para la caza».
Una muestra del apoyo hacia el sector cinegético ha sido la reciente firma de un convenio millonario entre el MAPA y la Fundación Artemisan, que se traduce en una inversión total de 1.295.644,44 euros, financiada al 50% por ambas entidades y a desarrollar durante 4 anualidades, para invertir en proyectos de monitorización y gestión de fauna silvestre.
La desafección del mundo rural hacia las políticas del Gobierno se mostró de manera multitudinaria en el 20M Rural, jornada en la que se manifestaron cientos de miles de cazadores por las calles de Madrid. En esa jornada que llevaba el lema de ‘Juntos por el campo’ también mostraron su protesta ganaderos, agricultores y demás gente del mundo rural. La protesta se fundamentaba en las políticas anticaza que hasta la fecha ha venido desarrollado el Gobierno de Pedro Sánchez.
Por su parte, partidos como VOX han mostrado su afinidad con el mundo rural, incluso llevándolo en forma de iconos en sus redes sociales durante esta campaña electoral andaluza. Olivos, barcos de pesca o caballos simbolizan esa defensa del campo y sus tradiciones. Ante la pujanza de este partido en el voto rural, el PSOE trataría de frenar este crecimiento acusando al partido de Santiago Abascal de «mentir». «Vox ha mentido con la inmigración, la educación, la pandemia, la violencia machista… Ahora le toca a la caza y al campo. Mienten cuando dicen que el Anteproyecto de Ley de Protección, Derechos y Bienestar animal va contra del sector cinegético: ¡No legisla esta materia!», afirmó en redes sociales Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE. El socialista añadió que «España no se entiende sin el mundo rural. Y nadie como el PSOE ha estado tan comprometido, desde hace 143 años, con el campo español».
Capturas de los vídeos de VOX difundidos durante esta campaña a las elecciones andaluzas.
Los sondeos demoscópicos apuntan hacia el peso que tendrá el voto de las zonas rurales en estas elecciones autonómicas. Y en este entorno, la caza tiene un papel protagonista. «La caza es absolutamente fundamental en España y se está viendo atacada por un Gobierno de España que quiere criminalizarla», manifestó el portavoz adjunto del Grupo Parlamentario VOX en la Asamblea de Madrid, Íñigo Henríquez de Luna, durante su visita a la última edición de la feria Cinegética. Se refirió en estos términos ante la intención de reformar el Código Penal, y además hizo alusión a la prohibición de caza en los parques nacionales, donde «luego se dedican a sacrificar a miles de reses, que podrían hacerlo perfectamente los cazadores».
Mostrar este apoyo hacia el sector del campo, al que está indisociablemente unida la caza, parece estar en boca de los políticos de los distintos partidos. En este sentido, el portavoz de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio en la Asamblea de Extremadura, Eduardo Béjar, mantiene que apoyar al mundo rural «es contar con él, invertir en él, cambiar para progresar». El socialista extremeño dice que «a pesar de los mensajes apocalípticos y bulos difundidos que pretenden desinformar, dividir y provocar la confrontación, ya sea entre territorios o colectivos, es necesario analizar los datos, las inversiones y las medidas desde el rigor». Béjar concluye que «falta mucha más lectura sosegada e información contrastada y nos sobran tuits».