Un lector nos remite la siguiente pregunta:
«¿El callo esternal puede salir también, a manera de ‘colgajo’, en las mamas de una perra? Si se deja crecer mucho y no se extirpa, ¿puede causar la muerte del animal? Saludos, Dianne».
Sí, la perra puede tener lo que denominamos pezones hipertróficos, que son pezones que aumentan su tamaño hasta adquirir una apariencia similar a los callos esternales. Estos tejidos los debemos considerar una característica, que no una patología, ya que no compromete ni la salud ni la vida del animal.
Voy a aprovechar para describir lo que es un callo, un callo esternal y un pezón hipertrófico.
CALLOS Y CALLO ESTERNAL
En medicina veterinaria se considera un callo a una placa de hiperqueratinización de forma oval o redonda en la piel. Estas lesiones se suelen dar principalmente en zonas con puntos de presión sobre protuberancias óseas. Podemos considerar los callos como una respuesta normal y protectora a repetidas isquemias inducidas por presión y la inflamación consecuente.
Es decir, cuando un animal apoya reiteradamente alguna protuberancia ósea sobre superficies duras, se produce una reacción de engrosamiento y endurecimiento de la piel como defensa natural.
Es muy frecuente verlas en los codos de los perros, y están especialmente predispuestas las razas grandes, sobre todo si duermen sobre cemento, ladrillo o madera, aunque muchos perros adultos desarrollan diferentes grados de callos en diferentes zonas.
Los callos no presentan pelo, son de color gris y tienen una superficie rugosa. Los propietarios se suelen alarmar cuando los descubren ya que los confunden con sarna u otras enfermedades de piel. De hecho, la mayoría de los callos son inocuos y no requieren tratamiento. Tan solo cuando se vuelven extremadamente duros, se ulceran o se infectan se debe considerar tratarlos.
Para prevenirlos conviene evitar que los perros se tumben sobre superficies duras, debiendo disponer de colchones de espuma, alfombras, mantas, camas de paja, etc. para tumbarse.
Hay que recordar que muchos perros tienen hábitos destructivos, por lo que si disponen de alfombras o mantas, las pueden romper y se las pueden llegar a comer, lo que puede ocasionarles importantes daños digestivos.
Un callo muy especial, y que afecta con particularidad a las razas de caza de pelo corto como pointer y bracos, son los denominados callos esternales. En este caso se aprecia una especie de crecimiento de tejido blando, sin aspecto tumoral, en la zona del esternón.
Su origen también es la isquemia que se produce sobre la piel del esternón cuando el perro se tumba; y para evitarlo, de nuevo conviene impedir que el perro se tumbe sobre superficies duras.
Puede adquirir un tamaño considerable, lo que hace que con frecuencia se rocen y dañen cuando el perro sale al monte. A través de estos roces pueden entrar infecciones y dar un cuadro de inflamación y supuración. Este problema se controla con antibióticos, y en caso de repetirse conviene pensar en la extirpación de este tejido.
PEZONES HIPERTRÓFICOS
Los pezones hipertróficos son algo diferente al callo esternal, aunque por su apariencia se pueden confundir. Son simplemente pezones que alcanzan un tamaño más grande –a veces mucho más grande– de lo normal.
Estos pezones se dan en hembras principalmente, aunque también se pueden presentar en algunos machos, si bien suelen ser más pequeños.
También la raza tiene importancia, ya que se pueden ver con frecuencia en determinadas razas como los sabuesos y en otras nunca aparece, como los podencos, lo que indica que es probable que tengan una base genética. Está por ver si el apoyo sobre superficies duras influye en su aparición.
Estos grandes pezones tienen dos problemas. El primero es reproductivo, ya que algunos llegan a ser tan grandes que los cachorritos recién nacidos no pueden mamar de ellos ya que exceden el tamaño de su boca. Esto supone que parte de la mama no va a ser funcional y los cachorros no pueden disponer de su alimento durante la lactancia.
Por otra parte, se suelen convertir en un problema a la hora de cazar. Estos pezones cuelgan mucho y se rozan constantemente con las matas, por lo que siempre están irritados, inflamados y sangran, lo que hace que haya un reacción por parte del tejido que aumenta su tamaño, haciendo que crezcan todavía más.
Los pezones grandes no son una patología, son más bien una característica, pero debido a que se convierten en un problema a la hora de salir al monte, en ocasiones es necesario plantear una solución. Siempre que se puede, conservar el pezón es lo mejor, pero cuando este se daña constantemente se puede pensar en su extirpación quirúrgica.
En general es un procedimiento sencillo y no requiere un gran postoperatorio, aunque se pierde la función de una sección de la mama durante la lactación de los cachorros.
Es importante diferenciar estos pezones de los tumores mamarios. Con los tumores mamarios se sigue una política totalmente diferente, se deben extirpar siempre y vigilar estrechamente a la perra.
La principal diferencia entre un pezón hipertrófico y un tumor mamario es la dureza del tejido. Mientras que el primero es blando y flácido, los tumores son duros y firmes.
Juan José García Estévez
Veterinario
Mi perro pointer mestizo. tiene un problema para echarse. Una de sus piernas traseras presenta dificultad. Hace piruetas para poder echarse. Será eso parte de la dolencia de cadera a la que son propensos. Su mamá quedó totalmente caída de la cadera.
Ami perrita los dos pezones de delante suele están invirtiendo es malo
Temgo una pitbull de 7 años, nunca tuvo crìas pero hace dìas está con una mama hinchada, juntó liquido, le estamos dando antibiotico, y ulseró, x ahi drena.. el tema es el orificio cada dìa mas grande, q puedo ponerle para cicatrizar un poco ?