Pronto terminará la temporada montera, ese será el momento de pensar en la campaña venidera. Pero antes es determinante asumir los errores cometidos para intentar corregirlos en el futuro. Nos queda un largo y duro camino por delante si queremos mejorar tanto en resultados como en calidad. Os ofrecemos consejos para que la gestión cinegética de su finca dé sus frutos.
Las tareas a realizar son variadas y dependen de cómo tengamos de cuidado el coto. Contando siempre con los permisos de la Administración, deberíamos empezar por tener a punto los caminos, sobre todo arreglando los desperfectos causados por la lluvia y las escorrentías.
1 MEJORA DE LA VEGETACIÓN LEÑOSA
Es el momento de podar la arboleda para lograr mejores cosechas que atraigan a las reses de modo natural. Todo lo que mejore el monte repercutirá de forma positiva en los resultados futuros. Es fundamental la encina.
La bellota melosa, la primera en caer, atraerá especialmente a los jabalís, pero no olvidemos que la masa del encinar no es muy vecera (un año da mucho fruto y poco o ninguno en otro), es decir, tiende a producir cosechas casi todos los años. Hay encinas que dan cosecha todas las temporadas (se denominan “castizas”).
La vecería aumenta con la densidad del bosque, con la pobreza del suelo, con las dificultades climáticas, con la presencia de plagas y con las podas abusivas. Clarear las veredas y limpiar los tiraderos es otra cuestión importante que no deberíamos dejar para última hora y que nos ayudará a obtener mejores resultados en el futuro.
2 PRADERAS
También el gradeo de la tierra en terrenos más pobres permitirá el afloramiento de bulbos y raíces que atraerán a las reses. O con la grada de discos podemos convertir una zona de jara vieja en una zona nueva, donde vuelva a crecer la hierba en abundancia en primavera. Para ello bastará abonar la zona con urea y esperar resultados.
3 PARCELAS DE CULTIVO
Si el terreno nos lo permite podemos labrar para sembrar la sementera, que nos permitirá en el verano fijar las reses en nuestra finca en el caso de que sea abierta. Esto creará madre en las zonas en las que antes no hubiese reses y lograremos la querencia de los bichos.
4. INSTALACIÓN DE EQUIPAMIENTOS DE COMIDA Y BEBIDA
Para aportar alimentos, agua y sales minerales (piedras de sal). Los comederos cumplen una doble función: por un lado, la aportación invernal de comida y, por otro, como suplemento de la dieta silvestre. Una cuestión fundamental son los puntos de agua. Intentaremos tener limpias las fuentes de agua naturales, aportando más puntos de agua artificiales si fuese necesario.
Esto es fundamental sobre todo para los jabalíes, y más aún en verano. El cuidado y creación de bañas es otro trabajo que no debemos descuidar.
5. ARREGLO DE PUESTOS Y ARMADAS
Deberíamos pensar si sería conveniente cambiar puestos de sitio o crear nuevas traviesas o armadas.
Es el momento, pues una vez llegada la berrea cualquier movimiento por la mancha la vaciaría en el caso de ser una finca abierta. Los datos que hemos obtenido de los participantes de la última montería serán fundamentales.
Hoy en día, con las nuevas tecnologías esto es más fácil. Aplicaciones de móvil e Internet son herramientas que debemos usar en nuestro beneficio.
6 OTRAS ACTUACIONES DE MEJORAS
Podemos crear también rascaderos para las reses, utilizando para ello troncos gruesos, o colocar piedras de sal en las manchas, pues su efecto positivo en las reses es bien conocido por los ganaderos, aportando sodio, potasio o cualquier otra sal necesaria.
También podemos reducir el uso de productos fitosanitarios en los cultivos lindantes con la zona de explotación cinegética, aportar puntualmente maíz, patatas u otro alimento o crear barreras en los caminos, que además de alejar a los furtivos nos procurarán la tranquilidad que necesitan las reses. En el caso de que transcurriesen canales por nuestra finca, sería conveniente la creación de balsas de salida para evitar ahogamientos de las reses que caen a él y no pueden salir. Son simples plataformas flotantes con rampas de salida.
Pero deberemos enfrentarnos a varias contingencias.
Los 11 factores limitantes más importantes en la gestión cinegética serían:
- Caza abusiva.
- Furtivismo.
- Tipos de vegetación (poca diversidad, cobertura escasa o muy densa).
- Clima (lluvia, sequía…).
- Predación.
- Competencia con otras especies.
- Epizootias eventuales, enfermedades…
- Interferencias con actividades forestales, agrícolas y ganaderas.
- Accesibilidad a puntos de agua durante todo el año.
- Recursos alimenticios escasos.
- Falta de tranquilidad.
Vemos que una buena gestión cinegética basada en criterios de calidad no es una tarea sencilla. Muchos son los factores que influyen en ella. Sobre la mayoría podemos actuar, pero hay otros en los cuales no podemos influir.
Decía un buen amigo que para que una finca tuviese reses debía cumplir dos requisitos: que tuviese comida y también tranquilidad. Podía ser un buen resumen a este pequeño artículo.