En el ladrido del perro en la caza I vimos cómo se han seleccionado las diferentes razas cinegéticas para que ladren o no, según lo que se necesite de ellas. Incluso hay algunas razas, como los sabuesos, que se han criado desde sus inicios para que modulen sus ladridos en función de lo que pase en la jornada, y así el cazador puede saber lo que está ocurriendo según lo que el perro vaya “diciendo”.
Pero a veces el ladrido se convierte en un verdadero problema.
Hay perros que ladran en exceso, cualquier pequeño ruido o alteración resulta suficiente para comenzar a ladrar de forma escandalosa. Esto se convierte en un problema para los dueños, y muy especialmente para los vecinos, que en los casos más graves pueden llegar a denunciar a los propietarios de los perros ladradores. ¿Cómo podemos evitar que las cosas lleguen a este extremo?
¿POR QUÉ UN PERRO SE VUELVE LADRADOR?
Para un animal social y cooperativo como es el perro, la comunicación es una parte importante de la interacción entre los individuos de un grupo. El ladrido es una de las formas de comunicación, una comunicación auditiva.
Para los investigadores, el ladrido comenzó como medio de aviso de una amenaza frente a un enemigo, y se fue haciendo cada vez más complejo, manifestando diferentes sentimientos o situaciones en la vida cotidiana de los perros. Por lo tanto, el ladrido es genético.
Es decir, el ladrido (o mejor dicho el ladrido excesivo) tiene una base genética, de manera que perros ladradores tienden a engendrar hijos ladradores.
En algunas razas se produce con más frecuencia esta poco deseada característica, como por ejemplo los perros de tamaño pequeño, y tiene que ver con que a los dueños de perros “falderos” les suele hacer gracia esta irritante conducta, y perpetúan esta característica.
BASE GENÉTICA Y REFUERZO.
Como vemos, el ladrido frecuente y por motivos insignificantes tiene una base genética, es decir, los cachorros que portan esta característica tienden a ladrar desde pequeños y por cualquier razón. Pero a esto se suma el refuerzo, en muchas ocasiones involuntario, que el dueño hace de esta conducta.
Voy a poner un ejemplo muy frecuente. Cuando alguien llama a la puerta de casa, es normal que el perro ladre. Como hemos visto, el origen del ladrido es avisar de una amenaza, por lo que si alguien llega a casa (el territorio) y sobre todo si es un desconocido (una amenaza), la reacción normal de un perro debe ser ladrar.
El problema llega cuando esos ladridos son excesivos y cuando el más mínimo sonido en la puerta provoca una escandalera por parte del perro. Esto es debido a que cuando el perro ha ladrado ante la amenaza para avisar de que algo estaba ocurriendo, el dueño ha respondido yendo a la puerta a ver qué pasaba.
El perro ladra, el dueño viene. ¡Qué más desea un perro que dominar a su dueño! Si el perro tiene tendencia a ser ladrador, irá aumentando los ladridos para perpetuar el divertido juego, que es mucho más excitante que estar tumbado en el sofá sin hacer nada.
SOLUCIÓN AL LADRIDO INDESEADO.
Antes de proponer soluciones al asunto del ladrido excesivo, tenemos que recordar que en la educación canina es más fácil evitar los problemas que solucionarlos. Por lo tanto, comenzaremos por observar si el nuevo cachorro que hemos adquirido tiende a ser ladrador, para evitar la estimulación de esta conducta.
Por ejemplo, un motivo de estímulo del ladrido es estar solo. Un cachorrito que está solo en una perrera, puede comenzar a ladrar y convertirse en el típico perro que no para de ladrar cuando está en la perrera. Si detectamos el inicio de esta conducta, una primera medida es acompañarlo de otro perro, que le haga compañía y evite que se sienta solo.
Es importante que este perro no sea ladrador, ya que a un perro ladrador nada le gusta más que un congénere que le acompañe y le estimule. Por el contrario, si empieza a ladrar y otro perro (especialmente si es mayor y le tiene respeto) no responde a sus llamadas, éstas tenderán a desaparecer.
Cuando tenemos un perro muy ladrador, hay que actuar básicamente por dos caminos:
- Por un lado, disciplinar al perro, es decir, tiene que respetarnos y acatar nuestras órdenes para que cuando le mandemos callar, obedezca. Esto se consigue con los habituales ejercicios de obediencia como caminar de la correa, sentarse, tumbarse, venir a la orden o estar quieto a la orden.
- En segundo lugar, nunca estimularemos la conducta del ladrido, no responderemos cuando el perro ladre, ignorándole cuando tenga este comportamiento. Si nuestro perro ladra y salta sin parar cada vez que le vamos a sacar a la calle, repetiremos el acto de vestirnos, coger la correa y las llaves varias veces al día sin sacarle a pasear. Estos actos terminarán por no tener consecuencias para el perro y, por lo tanto, ni le excitarán ni le estimularán para ladrar.
Con el ejemplo anterior de la persona que llama a la puerta haremos lo mismo, mostrar indiferencia. Si somos un poco hábiles con la electrónica, podemos poner un interruptor conectado con el timbre de la puerta cerca del sofá donde nos sentemos. De vez en cuando, lo activaremos sin hacer ni un gesto. El perro ladrará, pero verá que este acto no tiene consecuencias (el dueño no va a ver lo que pasa), por lo que dejará de actuar así.
ANSIEDAD POR SEPARACIÓN.
Algo más difícil de solucionar son los perros que ladran, y especialmente aúllan, cuando el dueño los deja solos. Este problema se denomina ansiedad por separación y requiere un tratamiento específico para el origen del ladrido, y no para el ladrido mismo, ya que es sólo un síntoma en este caso.
Por lo tanto, con este tipo de perros es recomendable hacer esta diferenciación y pedir el consejo de un veterinario para que nos ayude a corregirlo.
Carmen,
Gracias a ti por seguirnos y por tus palabras, nos alegra mucho haberte ayudado.
He descubierto ahora mismo Trofeodecaza y quería darles la enhorabuena. Soy hija de agricultores y siempre he vivido con animales. Tengo la gran s suerte de vivir en el campo y los bichos entran y salen de la casa. Uno de los perros se clavó una astilla grande en pata trasera y me ha ayudado mucho las explicaciones del veterinario a cerca de las distintas heridas. Gracias de verdad muchas gracias. Voy a seguirles