CARACTERÍSTICAS DE LA CARNE DEL CONEJO DE MONTE
El conejo, gracias a su rápida reproducción, es un animal muy abundante en todo el mundo. Existen muchas especies del mismo pero las diferencias más notables se encuentran entre el conejo silvestre o de monte y el doméstico o de granja.
Los conejos de monte o silvestres son más ligeros y más finos que los de granja. Presentan una carne más dura, más sabrosa, muy apreciada por el característico aroma que le aportan los vegetales que consumen en el monte.
La carne del conejo de monte de color rojizo, más intenso que la del conejo criado en granja y también posee menos cantidad de grasa en su composición. Tanto el contenido proteico como el graso dependen de la edad, el sexo, el hábitat y la alimentación.
En el mercado el conejo silvestre solo podrá adquirirse lógicamente en su época de caza y es aquí donde puede encontrarse limpio, desprovisto de vísceras e incluso despiezado. Se aconseja adquirir piezas no demasiado jóvenes, ya que tienen poco sabor, ni demasiado viejas porque su carne es dura y seca.
Para comprobar que hemos adquirido una pieza joven se ha de palpar la articulación de las patas delanteras y notar un pequeño hueso que se mueve. Si el ejemplar tiene las patas flexibles y el color de su carne es rosado es un síntoma de que la pieza es fresca.
La carne de conejo se presta a múltiples preparaciones. Se puede elaborar al horno, guisado, estofado, frito al ajillo e incluso a la parrilla si la pieza es joven.
Para potenciar el sabor de un conejo se recomienda marinar la carne con hierbas aromáticas o especias antes de cocinarla para que absorba bien el sabor y resulte más jugosa y tierna.
El conejo admite guarniciones muy variadas, verduras, hortalizas, arroces, patatas e incluso frutas.
RECETA DE CONEJO DE MONTE CON FRUTAS
Ingredientes (para 4 personas):
Para las frutas en agridulce:
Elaboración:
¡A disfrutar!
EL VINO: Culmen 2010 / Bod. LAN (D.O. La Rioja)
Color picota madura, brillante y muy cubierto. Aromas de fruta muy madura, ciruelas, zarzamoras, en compota y licorosas junto con notas de pastelería y balsámicas. Toques especiados, nuez moscada y canela, balsámicos y notas ahumadas y recuerdos minerales. Muy estructurado en boca, sedoso, con gran cuerpo. Nos deja un grato recuerdo de forma prolongada.
Previos a esta añada 2010, CULMEN solo pudo disfrutarse con las añadas de 1994, 1995, 2001, 2004, 2005 y 2007. Desde su propio nombre, se transmite que es la culminación en la trayectoria de LAN y lo más alto de la pirámide de su gama premium, integrada también por Viña Lanciano y LAN A MANO todos elaborados con uvas procedentes del mencionado viñedo. Esta añada solo saldrán al mercado 19.800 botellas.
Mar Romero
Receta de Pepe Rodríguez Rey.
Restaurante El Bohío de Illescas (Toledo).