El pasado martes se celebró en la sede de la Diputación de Gipuzkoa el Consejo anual de Caza. Tal y como viene ocurriendo en los últimos años desde que fueron incluidos por Bildu los ultra ecologistas protagonizaron dicho órgano consultivo.
Y decimos que fueron protagonistas, ya que sin escuchar una sola de las propuestas de la Administración ni de los cazadores, anunciaron RECURSO a la orden de vedas, tal y como el Pacma ha venido insistiendo en esta última semana. Es decir, recurrirán la orden de vedas sea cual sea su contenido.
La sentencia del Supremo sobre las órdenes de veda les otorga un poder que en caso de verse ratificado por los juzgados de primera instancia pondrá en peligro el inicio de la caza este año.
Cualquier medio les vale a los ultra-ecologistas, a quienes subvencionan las administraciones públicas, para impedir el ejercicio de una actividad legal y necesaria, desde la destrucción de puestos que supone la comisión de un delito o una batería de recursos.
Los representantes de la Federación Guipuzcoana de Caza aportaron soluciones técnicas ante este evidente riesgo, mediante la incorporación de los estudios de Caza Sostenible realizados por la Federación Vasca de Caza desde hace 20 años.
Los diferentes conflictos de gestión existentes y la huelga indefinida de caza mayor en Gipuzkoa marcaron todo el Consejo que lleva una deriva de ser más un órgano anticaza que de caza, por la presencia en el mismo de los grupos ultra ecologistas que, en vez de trabajar y buscar soluciones, se limitan única y exclusivamente a cuestionar la actividad cinegética.