La Real Federación Española de Caza (RFEC) quiere expresar su más firme condena e indignación por el atentado cometido contra una de las especies emblemáticas de España, tras la muerte de dos ejemplares de lince ibérico por disparos en la provincia de Jaén.
El primero de ellos, una hembra de algo más de un año de edad, apareció muerto el 13 de septiembre en Villanueva de la Reina y el segundo, un macho nacido este año, que se encontró el 9 de octubre en Vilches. Según desvelaron las necropsias, ambos murieron por el impacto de numerosos perdigones.
Ángel López Maraver, presidente de la RFEC, ha aseverado que el autor o autores de estos lamentables hechos “son desalmados que nada tienen que ver con los cazadores, que son respetuosos con las leyes y las especies protegidas”, por lo que ha pedido que no se criminalice al sector cinegético “ni se asocie a los cazadores con este delito realizado por uno o varios delincuentes”.
En el mismo sentido se ha expresado el presidente de la Federación Andaluza de Caza, José María Mancheño, quien ha afirmado: “Jamás este tipo de comportamientos delictivos pueden asociarse a la actividad cinegética, pues no forman parte de ella”.
Tanto la RFEC como la FAC siempre han apoyado y defendido la recuperación del lince y, por eso, piden a cualquier persona que pueda aportar algún dato para esclarecer los hechos que lo ponga en conocimiento de la Guardia Civil (mail: [email protected]) con la mayor brevedad. “Este caso debe representar un antes y un después en la colaboración entre cazadores y Guardia Civil para acabar con una lacra que perjudica a todos los que amamos, cuidamos y respetamos el medio ambiente”, ha indicado Mancheño.
Así mismo, la Federación nacional alienta al Seprona a realizar una investigación a fondo, esperando que caiga todo el peso de la ley sobre los responsables, y López Maraver ha anunciado que la entidad federativa que preside se personará como acusación particular, en conjunto con la Federación Andaluza de Caza, cuando se juzgue a los posibles culpables.
La RFEC, igualmente, comparte la consternación de las entidades conservacionistas implicadas en la preservación del lince ibérico por estos lamentables sucesos, ofreciendo su colaboración para luchar contra la pérdida de ejemplares de este felino por cualquier causa y, en concreto, para que casos como éste no vuelvan a repetirse.