Cantabria iniciará «cuanto antes» los controles de lobo ibérico aunque esto suponga recibir demandas judiciales. El Gobierno cántabro ha decidido proseguir con los controles de población lobera en la región considerando, no obstante, que se trata de una especie incluida en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre). Si esta caza de control de la población se llevará a cabo, la Fundación Franz Weber ha propuesto que se «bloqueen» las ayudas europeas a Cantabria.
Antonio Lucio, director general del Medio Natural del Gobierno de Cantabria, ha afirmado recientemente que están están «firmemente convencidos y dispuestos» a realizar el control de la especie, «lamentablemente con un marco legal muy constreñido, muy complicado». Añade que si tienen «que verse en los tribunales» con aquellos que les demanden por «mala aplicación» de la normativa, tendrán que asegurarse de que la «justificación» de cazar lobos sea «lo más sólida posible». Lucio ha comentado que, incluso si piden su inhabilitación por autorizar la caza de lobos, «confía en la Justicia».
La razón que ha mostrado el director general para hacer control poblacional del lobo es que en Cantabria se registran diariamente cuatro cabezas de ganado muertas por ataques del cánido, que sumaron de 1.400 a 1.500 en 2021 según datos oficiales. El máximo responsable del Medio Natural de Cantabria afirma que la región cuenta con «siete veces más de lobos que en 1986», aumentado en un 56 por ciento su distribución, pasando a tener 3.600 kilómetros cuadrados con presencia permanente del carnívoro.
Al conocer la noticia, la Fundación Franz Weber ha propuesto al comisario europeo de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius, que se «bloqueen» las ayudas europeas a Cantabria si no cumple «las prohibiciones existentes». Para esta Fundación, el Gobierno de Cantabria crearía «un peligroso precedente que no solo afectará a los animales, sino que podría implicar perjuicios para las personas y un problema irreparable para el conjunto de la naturaleza».
La fundación animalista quiere que Cantabria «pague las consecuencias de rebelarse frente a la normativa española y europea» y por ello propone que se bloquee toda ayuda comunitaria destinada a la agricultura o a la ganadería «al entender que el gobierno autonómico no cumple con los criterios básicos sobre compromiso con la naturaleza y sus poblaciones». La Fundación Franz Weber afirma que lo que pretende el Ejecutivo cántabro es «exterminar» al lobo de esta comunidad.