El Consejo de Formentera acaba de hacer pública la «autorización excepcional» para controlar determinadas especies y para proteger los cultivos de la isla. En concreto, el Ejecutivo insular autoriza desde el pasado domingo la caza por daños de la paloma torcaz durante jueves, sábados y domingos «en los lugares autorizados». Este permiso autoriza a los cazadores de cada acotado a cazar torcaces hasta el 9 de octubre en horario de 7:30 a 11.30 y de 17:30 a 21 horas.
Según ha explicado el consejero del Medio Rural, Josep Marí, la paloma torcaz es una especie que ha proliferado en Formentera durante los últimos años, cuya población causa daños en los cultivos de la isla. Por este motivo, el Consejo de Formentera autoriza su caza de manera excepcional, dentro de su «política de recuperación del campo y de control de plagas que suponen una amenaza para los cultivos agrícolas».
Por su parte, el Consejo de Mallorca ha aprobado este viernes la resolución anual de vedas para la temporada 2022/23 en una reunión celebrada en la localidad de Algaida. El calendario de caza ha tenido en cuenta la normativa europea del Grupo de Expertos en la Directiva Aves y Hábitats, por lo que se ha retrasado el periodo de media veda del 15 al 21 de agosto, excepto para la caza de conejos, y se ha propuesto fijar el comienzo de la caza de la tórtola turca el 12 de octubre.
En cuanto a la caza de la tórtola común o europea, al igual que durante la pasada temporada, su caza estará prohibida hasta que se dispongan mecanismos de caza adaptado para la especie. En este sentido, el Consejo mallorquín está realizando medidas de gestión como siembras cinegéticas o aportaciones de agua y comida en verano. Para la codorniz se establece un cupo de seis aves por cazador y día.