El TM 35 es el primer dispositivo de visión térmica que ha diseñado Swarovski Optik. Se trata de un monocular compacto y ligero con objetivo autoenfocable de 35 mm/f1.1 que se puede usar con aumento 4x digital como dispositivo de observación o bien montado en un visor utilizando un aumento (1x) óptico. Y, en este último caso, se convierte en un preciso visor térmico con los mismos aumentos que tenga el visor convencional utilizado, como explicaremos más adelante.
Y en ambos usos se caracteriza porque su pantalla AMOLED (de 2560×2048 pixeles) proporciona imágenes térmicas de alta calidad generadas por un sensor VOx no refrigerado (320 x 250 pixeles/12μm) de alta definición y calibrado automático tras el encendido. Imágenes que, además, tienen una frecuencia de actualización o número de fotogramas que capta el dispositivo por segundo muy alta: 60 Hz, por lo que incluso es posible visualizar con total definición animales en movimiento.
Se suministra en estuche de cartón de buena calidad y muy bien equipado, como es costumbre que Swarovski Optik presente sus productos (ver apartado Especificaciones).
Está totalmente protegido contra los golpes, el polvo y el agua (protección máxima IP68) y toda la superficie de su cuerpo es antideslizante, aunque agradable al tacto.
Es de color gris-verdoso y es más ancho por la base. Mide 170 mm de largo, 54 mm de ancho y 80 mm de alto, y solo pesa 495 gramos, por lo que se puede portar en un bolsillo amplio si no deseamos usar la correa.
La copa del ocular es giratoria y desmontable. Al girarla en el sentido contrario de las agujas del reloj se puede situar en cuatro posiciones que garantizan que, tanto las personas que usan gafas como las que no, puedan disfrutar del campo visual completo (10,9 x 8,7 m a 100 m).
Al llegar a su posición más extendida notamos una retención, pero si continuamos girando el ocular, este se puede desenroscar para poder instalar un adaptador especial que sirve para fijar el monocular en el visor. El adaptador se vende por separado y se denomina Swarovski Optik tMA.
En la parte posterior del cuerpo posee un sensor de luminosidad; en el costado izquierdo el mando de encendido (un botón alargado de presión) y, sobre la parte superior, otros tres mandos de presión más pequeños y dispuestos en fila: el más cercano al ocular Swarovski Optik lo denomina botón de «modo», al que le sigue botón «menos» y, al más cercano al objetivo, botón «más».
Cabe añadir que en la parte delantera del cuerpo posee el alojamiento para una batería Li-on 3000 mAh, que presenta la particularidad de que, para evitar que la tapa no se pierda y facilitar su instalación de noche, lleva integrada en su base la tapa del alojamiento con el cierre incorporado: solo hay que introducirla hasta el fondo y girar el cierre en sentido contrario de las agujas del reloj para que quede instalada.
Lógicamente, lo primero que hay que hacer, lo utilicemos como monocular o no, es cargar totalmente la batería con el cargador que se suministra como accesorio y que tiene dos senos para poder recargar un par de baterías al mismo tiempo (comprando la segunda o las que necesitemos aparte, pues con el dispositivo solo se suministra una). No obstante, con una batería totalmente cargada podemos usar el tM 35 unas siete horas.
Al presionar un segundo el botón de encendido (que, para mi gusto, va algo duro) se conecta el aparato y ajusta automáticamente la luminosidad o brillo de la pantalla para que se adapte a las condiciones de observación, según sea de día, durante el ocaso o por la noche.
No obstante, la luminosidad también se puede regular manualmente en 32 niveles utilizando los botones «más» y «menos» (cada vez que se pulsa el mando correspondiente sube o baja en un nivel), por lo que se puede afirmar que con el tM 35 siempre es posible visualizar correctamente las imágenes, independientemente de la luz con la que se utilice.
Imágenes que se pueden ver utilizando únicamente dos paletas de color: Black Hot o White Hot, que se seleccionan pulsado brevemente el botón de modo.
Como se ha apuntado, para acoplarlo al visor se utiliza con 1x óptico, para lo cual solo hay que pulsar el botón de modo durante dos segundos y el aumento cambia de 4x digital a 1x óptico. Es necesario usar 1x óptico para que, cuando está montado en el visor, el conjunto ‘tM 35 + visor’ se pueda utilizar con los aumentos que tenga el zoom del visor utilizado.
Y también es necesario usar un adaptador tMA que tenga el mismo diámetro que la campana del visor. Para acoplarlo al visor, lo primero que hay que hacer es desmontar la copa del ocular e instalar uno de sus extremos en una rosca de conexión M44x0,75 que tiene el ocular y que está tapada con una arandela que hay que retirar previamente.
A continuación, se aprietan los tornillos que lleva el adaptador (con una llave que se suministra con el tMA) y, por último, se introduce el extremo opuesto del adaptador en el objetivo, donde se fija a presión con un cierre tipo abrazadera.
Y ya se puede usar como visor térmico, aunque para que no varíe el punto de impacto es imprescindible que no se utilice el dispositivo con los 4x digital, sino con 1x óptico. Si el montaje se hace con este aumento, el fabricante garantiza que, utilizando un adaptador original tMA y un visor Swarovski Optik de las series dS, Z8i, Z6i, Z5(i) y Z3, el desvío máximo del punto de impacto es de 4 cm a los 100 m, lo que es una precisión muy alta para un Clip-on.
Por último, comentar que, para ahorrar batería, el tM 35 posee un sensor Swarolight de inclinación que desactiva el tM 35 cuando se utiliza para observar o montado en un rifle, siempre que el ángulo de inclinación hacia arriba o hacia abajo es superior a 70 grados o a 30 grados si se inclina lateralmente. Y, cuando detecta que está en posición de uso, lo conecta.
No es necesario utilizarlo y, de hecho, se puede conectar o desconectar pulsando al mismo tiempo durante tres segundos los botones «más» y «menos», pero es interesante porque permite portar conectado el tM 35 en el bolsillo o colgado del cuello (o del hombro instalado en el rifle, etc.) sin consumir batería.
No he disparado aún con el nuevo tM 35, pero sí lo he montado en un visor 2,5-10×56 de alta calidad y también lo he utilizado como monocular para ver de noche, al anochecer y completamente de día, y la calidad de imagen es muy alta. Si se ajusta bien la luminosidad de la pantalla, distingues los objetos perfectamente definidos como si los vieras en blanco y negro.
El fabricante, curiosamente, no proporciona datos sobre las distancias de detección, reconocimiento e identificación, ni yo dispongo de medios para determinarlas con exactitud, pero teniendo en cuenta que observas con 4x digital, he comprobado que son elevadas de noche e incluso de día, por lo que no dudo de su gran utilidad en caza ni como monocular ni montado en un rifle.
Concretamente, montado en el visor, utilizando hasta 8x, puedes apuntar perfectamente, incluso a plena luz del día si ajustas bien la luminosidad, lo que es muy interesante para cazar o poner a tiro el rifle con precisión si se cambia de munición, etcétera.
En resumen y como no podía ser de otra manera, Swarovski Optik ha puesto en el mercado un instrumento térmico fácil de utilizar y muy eficaz y útil para los cazadores.
Tipo de dispositivo: monocular térmico tipo Clip-on muy preciso (*). Se puede utilizar como monocular de mano o acoplado al objetivo de visores diurnos para convertirlos en visores térmicos.
Pantalla: AMOLED de 2560×2048 pixeles.
Sensor: microbolómetro VOx no refrigerado (uncooled). 320 x 250 pixeles/12μm. De alta definición y calibrado automático tras el encendido.
Frecuencia de actualización: 60 Hz.
Diámetro de la lente del objetivo: 35 mm/f1.1.
Aumento como Clip-on: 1x óptico.
Aumento como monocular de mano: 4x digital.
Campo de visión: 10,9 x 8,7 m a 100 m.
Dimensiones (mm): 170 largo x 54 ancho x 80 alto.
Peso: 495 gramos.
Características destacables:
Dispositivo térmico de alta gama acoplable a visores. Es ligero, ergonómico y muy fácil de utilizar: solo tiene tres botones de control más el de encendido (tiempo de inicio: 2 segundos). Durante el día o por la noche proporciona imágenes térmicas de alta calidad que se pueden observar con dos paletas de color: Black Hot y White Hot. Calibración de la imagen: automática.
Posee sensor de inclinación Swarolight que desactiva el tM 35 cuando se utiliza para observar o montado en un rifle si el ángulo de inclinación hacia arriba o hacia abajo es superior a 70 grados o a 30 grados si se inclina lateralmente.
Función de ajuste automático de la luminosidad que adapta el brillo de la pantalla al conectar el dispositivo (o cuando el Swarolight la activa). Función manual de ajuste del brillo de la pantalla en 32 niveles que memoriza la luminosidad seleccionada durante el día, el ocaso y la noche. Grado de protección IP68. (máximo contra partículas y líquidos). Temperatura de funcionamiento: -15 + 50 grados centígrados. Funciona con una batería Li-on 3000 mAh recargable con autonomía para 7 horas, aprox.
Accesorios: se suministra en estuche Swarovski Optik de cartón con tapa para el ocular, copa contra luz lateral, tapa del objetivo (instalada), correa de mano, bolso de transporte, correa de transporte, batería, cargador de batería de dos senos, cable de carga micro-USB, toallita de limpieza y documentación.
P.V.P.: 4.800 euros.
Más información: https://equipate.esteller.com/
Juan Francisco París