La prestigiosa firma austriaca ha lanzado un binocular de alta calidad con telémetro láser integrado que posee función de corrección de ángulo y proporciona al cazador la distancia de tiro compensada.
Lo hemos probado en versión 10×42 pero también se fabrica en 8×42.
Cuando se dispara con ángulo la gravedad no actúa sobre el proyectil de igual modo que cuando se dispara en la horizontal, sino que lo hace con una intensidad total menor.
Es como si disparáramos a una distancia menor y por tanto la caída del proyectil también es menor.
Si es poco pronunciado, su efecto en la trayectoria de la bala es despreciable, pero cuando se aproxima o supera los 45 grados (en terrenos con fuertes pendientes) puede ser el responsable de que se falle el blanco porque el tiro da más alto de lo que esperamos, por lo que resulta crucial tener en cuenta su efecto y calcular correctamente la caída de la bala.
Algo que hace unos años no era nada fácil ni práctico para un cazador porque para poder hacerlo con precisión tenía que medir el ángulo y calcular la distancia de tiro compensada introduciendo el ángulo y la distancia real en una fórmula matemática.
PRISMÁTICOS KAHLES HELIA RANGEFINDER
Pero hoy día, por fortuna, existen aparatos como el que les presentamos que sirven para poder calcular rápidamente y con precisión la distancia de tiro compensada.
Los fabrican desde hace unos años las marcas de óptica más prestigiosas. Sin embargo, el nuevo prismático Helia Rangefinder, es más moderno que los demás, también el más compacto, el que tiene más alcance (1500 metros, nada menos) y el más fácil e intuitivo de manejar.
Al menos comparado con otros aparatos que he probado, incluso de muy alta gama.
También es más original y elegante. Su chasis de aleación está recubierto de goma antideslizante que es de color marrón (en vez de ser verde o negro, como los demás binoculares y telémetros) y está equipado con una correa de cuero y con tapas de fieltro de lana (loden) totalmente silenciosas e hidrófugas.
Consiste en un prismático Khales Helia de alta gama (y por tanto con lentes con alta transmisión de la luz, impermeable, con un gran campo de visión, etc.; ver ficha de características) que lleva incorporado un potente telémetro láser que mide, de forma prácticamente instantánea (en menos de 1 segundo), distancias en yardas o metros, según se programe el aparato; el ángulo de disparo y la distancia de tiro compensada en función del ángulo, también en yardas o metros.
Se fabrica en dos versiones: 8×42 y10x42 que son prácticamente idénticas porque pesan lo mismo y tienen las mismas dimensiones y prestaciones telemétricas.
En lo único que se diferencian es en su potencia y, como consecuencia de la diferencia de aumentos, también en el campo de visión (125 m del RF 8×42 frente a 107 m de la versión 10×42), pupila de salida y factor crepuscular.
UN TELÉMETRO DE ALTAS PRESTACIONES
Es igualmente uno de los telémetros con compensación de ángulo más intuitivos, precisos y fáciles de manejar que he probado.
Sobre el costado derecho del binocular el aparato posee dos teclas o botones al alcance de los dedos, por lo que se pueden pulsar cómodamente mientras se observa: el botón de medición y el de modo, este último situado a continuación del primero.
Al presionar el de medición se activa una pantalla interna que está situada en el ocular derecho y aparece un cuadrado en el centro que, a modo de punto de mira, sirve para apuntar al blanco. Y luego, al soltar este botón, aparecen en la pantalla las mediciones.
Y al presionar la tecla de modo durante tres segundos se accede a un menú con dos programas que permiten:
• Seleccionar la medición en yardas o metros.
• Regular la intensidad o brillo de la pantalla para que su luminosidad no sea excesiva o insuficiente. Para ello solo hay que pulsar el botón de medición para activar la pantalla y a continuación el de modo.
• Visualizar en la pantalla lecturas de la distancia real y del ángulo (que aparecen en la parte inferior y superior de la pantalla, respectivamente, separadas por el punto de mira) o bien:
• Activar la función EAC (compensación de ángulo mejorada) que permite visualizar en la parte superior de la pantalla la distancia de tiro compensada en función del ángulo (debajo del punto de mira aparece también, como en la opción anterior, la distancia real).
Cabe añadir además que el Helia Rangefinder se puede utilizar, en modo exploración, para medir objetos en continuo movimiento pulsando el botón de medición más de 3 segundos.
Y que posee un indicador de batería baja que parpadea en la pantalla cuando queda energía para hacer, aproximadamente, unas 100 mediciones.
La duración de la batería, del tipo CR2, es de unas 3000 mediciones y va alojada en un compartimiento ubicado detrás del cuerpo del binocular, en el tubo derecho.
UN PRISMÁTICO MUY INTUITIVO Y FÁCIL DE MANEJAR
He probado el Helia Rangefinder en versión 10×42 en múltiples ocasiones.
Lo primero que hice y que recomiendo que hagan ustedes siempre que adquieran un aparato óptico, fue leerme detenidamente el manual de instrucciones (en varios idiomas, incluido el castellano).
Esto me permitió conocer todas sus prestaciones y ajustar correctamente las dioptrías de los dos oculares, lo que es fundamental para poder ver nítida la pantalla.
Por la misma razón, también resulta crucial ajustar correctamente la apertura de los binoculares a nuestra distancia interpupilar, porque en caso contrario perdemos campo visual y no se divisa bien la pantalla porque esta queda descentrada con respecto al ojo. Esta operación conviene hacerla con la pantalla activada.
Igualmente, siguiendo las instrucciones logré entrar en el menú y, fácilmente, seleccionar la función EAC para que me proporcionara lecturas en metros de la distancia de tiro compensada (de fábrica viene programado para que mida el ángulo de tiro).
Y acto seguido me pasé varios días realizando mediciones (y comparándolas con las de otros telémetros), tanto con malas condiciones de luz como a pleno sol.
Y en ambos casos comprobé que la pantalla siempre se puede leer con nitidez regulando su brillo con la intensidad adecuada, operación que no tiene dificultad alguna y se hace en pocos segundos, lo que es muy útil cuando ‘escudriñas’ terrenos que tienen zonas de sombra y otras soleadas.
Y que el modo de exploración es muy efectivo. Lo he probado siguiendo el movimiento de coches y motocicletas a distancias a veces cercanas al kilómetro.
El primer día, he de reconocerlo, me resultaban incómodas las tapas, que por cierto se pueden fijar a la correa para que no se pierdan o bien instalarla de forma independiente de esta (con el aparato también se proporcionan instrucciones para su montaje).
Pero un par de días después comenzaron a gustarme y parecerme incluso mucho más prácticas que las convencionales porque cumplen el mismo cometido pero se pueden retirar más rápido.
Por todo lo expuesto considero que el nuevo Kahles Helia Rangefinder es, al mismo tiempo, el binocular telémetro con compensación de ángulo más compacto, completo, rápido y fácil de manejar que he tenido la oportunidad de probar hasta la fecha.
Un producto totalmente recomendable que no dudaría en comprarme porque además, teniendo en cuenta su calidad y prestaciones, tiene muy buen precio.