De «histórico» califica la Asociación Española de Rehalas (AER) la celebración del trigésimo aniversario de la feria FECIEX, «un evento de esta naturaleza tiene el tiempo como medida y podemos afirmar que FECIEX ha pasado de ser una feria consolidada a constituir un punto de encuentro consagrado que une en Badajoz a cazadores y pescadores de ambos lados de la península Ibérica».
Se han dado en esta feria internacional, «los ingredientes necesarios para que el éxito no sea casualidad»: en primer lugar, el apoyo de la administración local y autonómica, de forma que pudimos encontrar paseando por la feria a los máximos representantes de la Junta de Extremadura, junto con el equipo municipal de gobierno con su alcalde, Ignacio Gragera, a la cabeza.
En segundo lugar, cuenta IFEBA con un equipo de trabajo «comprometido, eficaz y eficiente, nutrido de colaboradores desinteresados, que hacen un trabajo tan oscuro como necesario para que, cuando llega la hora, esté todo en su sitio y se cubra un interesante programa de actividades tan amplio como variado», señala la AER.
Además, felicita a Pepa Dueñas y a todo su equipo, que han conseguido que Badajoz «haya sido el centro del mundo de la montería y la rehala», gracias, entre otros actos, a la entrega de los Premios Todomontería, que ha reunido a los principales organizadores en torno a esta plataforma dirigida por Emilio Jiménez, que ha tenido a bien reconocer la trayectoria como rehalero a Perico Castejón, con un emotivo homenaje.
En tercer lugar, en IFEBA «se respira afición a la caza y a la pesca fluvial -indica la asociación rehalera-. Un condimento esencial para cualquier evento de este tipo, que lo hace cercano y atractivo para el visitante. Al entrar en la feria, nos sentimos atraídos por la vida que le dan las actividades que se desarrollan a nuestro alrededor», donde igual se han visto niños realizando manualidades, como carreras de galgos o pruebas de rastro, y todo ello «sin olvidar el colorido que han dado este año nuestras rehalas: a la imponente presencia de la rehala del Marqués de Valdueza, que nos visitó el sábado, le han seguido paseos de colleras y toques de caracola que han puesto banda sonora a nuestra afición».
Otro de los secretos de este evento es la importancia que se le reconoce a las entidades sin ánimo de lucro que defienden a diario la caza en todos los frentes.
Así, la Federación Extremeña de Caza ha aportado el peso de la caza social en Extremadura y, junto con Juvenex, se ha apostado por la juventud, motor del relevo generacional del que estamos tan necesitados, y desde la Asociación Española de Rehalas, como única representante del sector en la feria, también se ha intentado aportar su granito de arena.
Pero nada de esto sería suficiente sin la respuesta social que ha tenido la trigésima edición de FECIEX. Los visitantes, procedentes, no solo de Extremadura y el resto de España, sino también de la vecina Portugal, «han dictado sentencia: la caza y la pesca fluvial son esenciales y hay que seguir apoyándolas, no solo con palabras, sino con hechos, que son los que convencen».